domingo, 11 de septiembre de 2016

Y vos hablando de las torres... (11-09-1973)

Golpe de estado en Chile
(11-09-1973) 








-"Tengo que darte una noticia que ha conmocionado al mundo entero... Vas a tener que hacerte fuerte..." le decía Solita a una piba que había salido de la casa de Gran Hermano haciendo alusión al "atentado" a las Torres Gemelas en un momento que quedó para la historia.
Un ataque contra las Torres del World Trade Center que el mundo lloró pero que al país del norte le vino al pelo para mandarse a invadir Irak junto con los primos ingleses...
En fin, ya se conoce la historia... 
Tanto que cuando llega el 11 de septiembre todos se acuerdan de las Torres... algunos del maestro... y los menos recordamos la muerte de Salvador Allende asesinado por Pinochet en 1973 en plena vigencia del Plan Cóndor.
Quizás sea personal, pero cuando lees sobre tipos como Allende, como el Che, no podes creer que sean así realmente...
Pero la historia tiene esas páginas dedicadas a esta gente, afortunadamente.
No voy a transcribir la biografía de Salvador Allende acá... digamos que para eso, hasta yo mismo iría al Wikipedia.
Solo se intenta dejar, por lo menos, una mínima apreciación y recordatoria al paso de hombres como Allende por la historia de uno. Y obvio, por la historia misma.
Sí voy a dejar aquello que leí una vez y que hizo que me interesara en este presidente de Chile que aquel 11 de septiembre del 73 se atrincherara en La Casa de la Moneda resistiendo el ataque golpista de Pinochet, armado con un fusil que le fuera obsequiado por el comandante Fidel Castro años atras... defendiendo al pueblo que lo habia elegido para dirigir el país.
Y es lo que se conoce como "El último discurso de Salvador Allende" transmitido por Radio Magallanes. (De mas esta decir lo que pasó con la radio horas después).




"Seguramente ésta será la última oportunidad en que pueda dirigirme a ustedes. La Fuerza Aérea ha bombardeado las torres de Radio Postales y Radio Corporación. Mis palabras no tienen amargura sino decepción. Que sean ellas el castigo moral para los que han traicionado el juramento que hicieron: soldados de Chile, comandantes en jefe titulares, el almirante Merino, que se ha autodesignado comandante de la Armada, más el señor Mendoza, general rastrero que sólo ayer manifestara su fidelidad y lealtad al Gobierno, y que también se ha autodenominado Director General de carabineros. Ante estos hechos sólo me cabe decir a los trabajadores: ¡Yo no voy a renunciar! Colocado en un tránsito histórico, pagaré con mi vida la lealtad del pueblo. Y les digo que tengo la certeza de que la semilla que hemos entregado a la conciencia digna de miles y miles de chilenos, no podrá ser segada definitivamente. Tienen la fuerza, podrán avasallarnos, pero no se detienen los procesos sociales ni con el crimen ni con la fuerza. La historia es nuestra y la hacen los pueblos.
Trabajadores de mi Patria: quiero agradecerles la lealtad que siempre tuvieron, la confianza que depositaron en un hombre que sólo fue intérprete de grandes anhelos de justicia, que empeñó su palabra en que respetaría la Constitución y la ley, y así lo hizo. En este momento definitivo, el último en que yo pueda dirigirme a ustedes, quiero que aprovechen la lección: el capital foráneo, el imperialismo, unidos a la reacción, creó el clima para que las Fuerzas Armadas rompieran su tradición, la que les enseñara el general Schneider y reafirmara el comandante Araya, víctimas del mismo sector social que hoy estará en sus casas esperando con mano ajena reconquistar el poder para seguir defendiendo sus granjerías y sus privilegios.
Me dirijo, sobre todo, a la modesta mujer de nuestra tierra, a la campesina que creyó en nosotros, a la abuela que trabajó más, a la madre que supo de nuestra preocupación por los niños. Me dirijo a los profesionales de la Patria, a los profesionales patriotas que siguieron trabajando contra la sedición auspiciada por los colegios profesionales, colegios de clases para defender también las ventajas de una sociedad capitalista de unos pocos.
Me dirijo a la juventud, a aquellos que cantaron y entregaron su alegría y su espíritu de lucha. Me dirijo al hombre de Chile, al obrero, al campesino, al intelectual, a aquellos que serán perseguidos, porque en nuestro país el fascismo ya estuvo hace muchas horas presente; en los atentados terroristas, volando los puentes, cortando las vías férreas, destruyendo lo oleoductos y los gaseoductos, frente al silencio de quienes tenían la obligación de proceder. Estaban comprometidos. La historia los juzgará.
Seguramente Radio Magallanes será acallada y el metal tranquilo de mi voz ya no llegará a ustedes. No importa. La seguirán oyendo. Siempre estaré junto a ustedes. Por lo menos mi recuerdo será el de un hombre digno que fue leal con la Patria.
El pueblo debe defenderse, pero no sacrificarse. El pueblo no debe dejarse arrasar ni acribillar, pero tampoco puede humillarse.
Trabajadores de mi Patria, tengo fe en Chile y su destino. Superarán otros hombres este momento gris y amargo en el que la traición pretende imponerse. Sigan ustedes sabiendo que, mucho más temprano que tarde, de nuevo se abrirán las grandes alamedas por donde pase el hombre libre, para construir una sociedad mejor.
¡Viva Chile! ¡Viva el pueblo! ¡Vivan los trabajadores!
Estas son mis últimas palabras y tengo la certeza de que mi sacrificio no será en vano, tengo la certeza de que, por lo menos, será una lección moral que castigará la felonía, la cobardía y la traición."



lunes, 5 de septiembre de 2016

Una película de la gran p... !





En el anterior post donde hice una reseña acerca de la Crack Bang Boom y de los Podcasts de temática comiquera que escucho,  mencione un episodio curioso de mi vida que refiere a mi acercamiento a la "obra" de este artista argentino.
Se me ocurrió que escuchar bromas telefónicas era una buena terapia post-separación.
Necesitaba desviar los pensamientos típicos de alguien que esta re-estrenando su soltería... su vuelta a la soledad...
Necesitaba no pensar en "ella" todo el tiempo.
Me urgía darle un trabajo a mi mente para tenerla ocupada ... distraída... concentrada.
Por otro lado, me debía hace mucho empaparme de esta genialidad de chapa argentina que fueron estas bromas por teléfono de la mano del Sr. Julio Victorio de Rissio, más conocido como el Dr. Tangalanga.


 


  

La leyenda nos habla de un señor padeciente de una enfermedad terminal que afectaba su cabeza... y que lo obligaba a pasar el día entero en la cama.
Un tal Sixto.
Su amigo Julio, viajaba de Retiro a San Fernando durante la semana a visitarlo. Lo que se dice en criollo: A hacerle el aguante.
Durante una de sus charlas, en una de estas visitas, Sixto comenta a Julio la barbaridad de plata que le cobraba el veterinario por atender a su perro.
Ni corto ni perezoso, Julio se ofreció a llamar a este veterinario, con la mala suerte de no encontrarlo.
Es así que ese día se volvió a su casa llevándose los datos del tipo, y pensando en el regalo que hacía poco había recibido...
Un aparato que permitía el grabado de las conversaciones telefónicas.

Con la clara idea fija de increparlo, se dispuso a llamar a este veterinario que "cobraba como Favaloro"... Y por supuesto, lo grabó.
Obviamente, el primero en escucharlo fue Sixto.
Y detonó en carcajadas...
Visita que recibía Sixto, visita que le hacía escuchar la grabación.
Por supuesto que a ése llamado le siguieron varios más...
Todos con la idea de ponerle ese condimento al estado de su amigo enfermo.
Sixto finalmente fallece en el 64 y Julio decide no seguir con esto de los llamados... ya que no tenía motivos para hacerlo...

No es sino hasta 15 años después,  que Julio cae enfermo de una hepatitis que lo tira a la cama...
Y víctima de un aburrimiento terrible, decide nuevamente agarrar el teléfono y mitigar ese hastío embromando a cuanto cristiano estuviera del otro lado de la línea.
Y desde ese día (afortunadamente) no paro más.









Básicamente ésa es la historia del Dr. Tangalanga, el "alter ego" de Julio que cobraba vida ni bien agarraba el teléfono.
Que también podía ser Tarufetti... Rocatagliatta...  Rigatuzzo... Rabufetti... y un etcétera tan variado como la cabeza de Julio pudiese crear...
Porque, claro... era de suma importancia no revelar la verdadera identidad ante las consecuencias que podía llegar a traer una broma telefónica...
Sobre todo cuando la llamada buscaba irritar deliberadamente a la otra persona.

Con el tiempo comenzaría lo que sería la otra etapa del artista...
Su última etapa.
La etapa de los shows organizados para el público...
La etapa de los llamados en vivo...
Esa fue la etapa donde finalmente pudimos conocer al Dr. Tangalanga públicamente...
Y poder verlo en acción.
Eso sí... a los que nunca pudimos conocer... fue a las víctimas.
...
...
Hasta hoy.




 





"Victimas de Tangalanga" es el resultado de un proyecto del director Diego Recalde... que le llevó más de 5 años realizar.
Tangalaniano de la primera hora...
Diego era un adolescente de tantos que, en los años 80 y con amigos, se pasaba horas escuchando los famosos cassettes de Tangalanga... a tal punto de aprendérselos de memoria...
Aquellos cassettes que eran grabados de forma casera y que simplemente le pasabas a un amigo porque querías que escuchara "como habia engranado este tipo"... o "como puteaba aquel otro"... y de forma totalmente clandestina,  que para nada es un dato menor.

Ahora bien...
Es necesario analizar en este contexto a "la broma telefónica" y dejar en claro algunas particularidades.
Primero su carácter humorístico que lo ubica en una posición distinta a la que toma el humor habitual al que se está acostumbrado a presenciar... ya que la broma telefónica no esta guionada y actuada como sería el caso de un contador de chistes. Y además concluye en la reacción real y espontanea de aquel que recibe la llamada. Resultando ésta el detonador de la gracia.
Y segundo, su condición como una forma más de comunicación entre el emisor y el receptor.
Lo que nos lleva a la inmediata conclusión de que si bien esto es un resultado de la ocurrencia del Dr. Tangalanga en cuanto a la genialidad del asunto... no todo el crédito le corresponde a él... sino que el %50 es obra del receptor.

Es así que Diego Recalde decide cerrar un círculo que completaría la representación de aquellos llamados.
Al mejor estilo detectivesco se propuso rastrear a las víctimas del Doctor, basándose en los pocos datos que las mismas grabaciones brindaban.
Nombres... direcciones con numeración... números de teléfono... ocupaciones... profesiones...
Y con eso arranco la gran búsqueda.
El resultado fue mejor de lo que Diego esperaba.
Tal es así que ya se confirma una segunda parte... y hasta una tercera.





"Víctimas de Tangalanga" reúne los testimonios de las personas que fueron protagonistas de lo que Diego remarca como "las llamadas mas emblemáticas" del Doctor ...
Y atención al dato: a más de treinta años de realizadas!

La película es materia obligada para los seguidores de la obra del Dr. Tangalanga...
La recomienda totalmente éste humilde servidor que les escribe.
Ésta es una película de "la gran puta". Así que "no seas pelotudo" y anda a verla.